noviembre 22, 2014
Una vez más, Doctor Who nos sorprende con un emocionante capítulo de esta magnífica serie. Ya estamos al final de la temporada, por lo que este último capítulo se divide en dos partes y tal y como en las anteriores, tiene pinta de que nos vamos a llevar más de una sorpresa. Sea como sea, va a estar muy interesante.
Episodio de morderse las uñas hasta no dejar ni media. Aunque al principio parezca demasiado absurdo, poco a poco nos irá atrapando hasta dejarnos con las ganas de ver qué demonios sucede (cómo suele pasar en esta maravillosa serie y sobretodo, en los finales de temporada). Al inicio del episodio nos encontramos con Clara Oswald hablando por teléfono con su pareja, Danny Pink. Clara tiene una serie de post-it enganchados en una estantería, de los cuales coge uno y lee un "te quiero" para Dan (con poco sentimiento, la verdad). Una situación cuanto menos curiosa , que a estas alturas de la serie, difícilmente nos sorprende.
Mientras están hablando por teléfono y Clara le suelta una cursilada a Dan, este es atropellado. Clara lo pasará muy mal, tanto que llamará al Doctor con la intención de que la ayude a traer de vuelta a su novio, aunque lo hará con un método un tanto macabro, pues intentará coaccionar al Doctor amenazándole con destruir todas las llaves de la TARDIS, dejando al Señor del Tiempo fuera de esta para siempre. Aquí ya vemos como sale a flote el lado más irascible y humano de Clara, pues no duda ni un momento en cometeruna locura para conseguir traer de nuevo a la vida a su amado fallecido. A pesar de que se nos plantea como si estuviese sucediendo, el muy avispado Doctor ya se había dado cuenta de que algo sucedía con Clara y montó una pantomima, dejando a Clara sonámbula y permitiendo que hiciese lo que tenía pensado hacer, pero en sueños, dejándonos a todos tal que así:
De este modo el Doctor descubre que Clara estaba dispuesta a traicionarle, pero a pesar de ello, decide ayudarla y buscar el lugar al que van los humanos después de morir para traer a Danny a la vida. Sí, aunque el Doctor suele mostrarse frío y calculador en más de un momento crítico, siempre nos sorprende con un lado muy humano y enternecedor, casi cursi.
Dan aparece en un extraño despacho, en el que le comunicarán que ha fallecido y le explicarán algún que otro dato sobre la "vida" en el más allá, como por ejemplo, que su cuerpo y su mente siguen conectados y todo lo que sienta su cuerpo, lo sentirá en el más allá (de modo que si lo incineran o dona sus órganos, sentirá el dolor). Esto ya empieza a ponerme reflexivo y me hace plantearme qué demonios quiero que hagan con mi cuerpo cuando la palme, porque a ver si va a ser verdad y la liamos. Con lo fácil que sería morirse y ya está, nos tienen que venir con la posibilidad del más allá... Creo que me decantaré por que dejen mi cadáver sentado en el sofá de casa, siempre vigilante. Y pobre del que se atreva a tocar mi fiambre.
Conectando a Clara con la matriz de la TARDIS consiguen que la nave aterrice en un lugar con altas probabilidades de que la línea temporal de Clara y de Dan se vuelvan a conectar. Este sitio se nos presenta como un inmenso mausoleo con peceras en las que hay sumergidos esqueletos sentados. Mientras Clara y el Doctor se pasean, aparece una mujer que ya nos es familiar (pues aparece en episodios anteriores) y dice ser un androide. Clara y el Doctor tienen una pequeña charla con ella y luego van a ver a un hombre que conseguirá que Clara y Dan se pongan en contacto. Ya de primeras, cuando la tal "Missy" dice ser un androide nos hace sospechar, pero cuando se lanza a comerle la boca al Doctor nos acaba de desconcertar por completo, y si no que se lo digan a Clara...
Pero no será hasta el momento clave en que el Doctor salga a investigar el mausoleo y enfoquen a las puertas que nos daremos cuenta de que los Cybermen tienen algo que ver con el asunto (pues las puertas son claramente los ojos de un cybermen).
Total, que resulta que tienen encerradas las mentes de los muertos en un disco duro de los Señores del Tiempo y utilizan los cuerpos de los muertos para crear Cybermen, lo que pasa que nadie los ve porqué están sumergidos en un fluído-rayosX que sólo permite ver la materia orgánica, por eso en las peceras sólo se ven esqueletos (hasta que se abren y salen los Cybermen a liarla parda).
Cómo no, dejan lo más chocante para el final y es que resulta que la tal Missy es una Señora del Tiempo, y no una cualquiera, resulta que Missy es el diminituvo de Mistress. Vamos, que nuestro buen amigo el Maestro no estaba muerto, estaba de parranda, o mejor dicho, explorando una nueva sexualidad (más bien un nuevo género...).
Os dejo esperando a que llegue el próximo episodio y ver que pasa con el Doctor, Clara, Dan, el Maestro y la panda de Cybermen sueltos de fiesta loca por la ciudad. Sí queréis comentar algo no dudéis en dejarlo por aquí abajo, siempre es agradable leer más opiniones.
Un saludo de Nigma y hasta el próximo post, whovians.
